Federico Zirulnik, integrante del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz se refirió la suba que ha experimentado el dólar blue y señaló que “no debería haber un canal directo” de transferencia a los precios “como si sucede cuando sube el tipo de cambio oficial” porque este representa un “mercado pequeño” y altamente volátil. Y descartó la dolarización como mecanismo para frenar la inflación.
En La Mecha, por Radio Provincia, el economista analizó que ese mercado puede estar influenciado “por la incertidumbre habitual de un año de elecciones” y a esto ahora también se le suman “los rumores de posibles dolarización”. Y, por ello aclaró que “aunque no debiera” impactar en los precios “indirectamente termina afectando” porque “se espera una devaluación en el tipo de cambio oficial”.
Seguido, agregó que “la noticia de la inflación que se conoció hace unos días es una ingrediente más que aumenta la incertidumbre” y esto se suma a que el “Gobierno no viene acertando y logrando que la dinámica inflacionaria se desacelere (…) porque no se están atacando los componentes inerciales que motorizan la suba indiscriminada de los precios”.
Zirulnik, denunció que en ese contexto, “los actores más fuertes del mercado que tienen una ideología política distinta a la de los gobiernos populares presionan más para lograr algún rédito”.
En ese marco, se refirió a las propuestas de dolarización de la economía y aseguró que: “No sería nada beneficioso ni lo fue para ningún país del mundo. Es vender espejitos de colores porque es cierto que se frenaría de cuajo la inflación pero, la cosa es a costa de qué”.
Porque según explicó para llevar adelante esta política monetaria “se necesitarían muchas reservas en el Banco Central, cosa que Argentina no tiene “o dolarizar a un tipo de cambio altísimo y eso generaría un impacto regresivo ya que caerían los salarios reales. Y los trabajadores y la clase media serían los que más sufrirían”.
Y además “se pierde la autonomía en la política monetaria, y eso le impide al país poder hacer frente a corrida bancarias, o restringe la capacidad de hacer gasto publico expansivo o contracíclico” aseguró y concluyó: “Una pandemia con un Estado sin la capacidad de emitir, sería un fracaso”.