Una jueza de familia de los Tribunales de San Isidro, le otorgó la tenencia y custodia de un menor de 8 años a su padre, pese a que fue denunciado por abusar de él y de su hermana; por amenazas de muerte contra su expareja y por incumplimiento en la manutención de ambos hijos.
Se trata de la jueza subrogante del Juzgado Número 2 de Familia, Laura Sabrina Citraro, quien ordenó retirar al niño por la fuerza de la casa de su madre en una escena desgarradora de llantos y desesperación que se viralizó a través de las redes sociales y los medios de comunicación.
La abogada de la madre del niño, Patricia Martínez Valarino, dijo a De Une que la causa data de 2015 y confirmó que el padre del menor, llamado Alejandro Rivero, trabaja como comandante en Aerolíneas.
También reveló que “después de mucho esfuerzo, en diciembre del año pasado se llegó a un acuerdo para que el niño fuera con su padre tres veces a la semana, pero después de la primera semana no quiso ir más. La jueza consideró que la madre estaba prohibiendo el contacto y ordenó que la custodia personal la tuviera el padre, quien está citado a indagatoria por el delito de amenaza de muerte con armas a la madre y tiene antecedentes de violencia”.
La letrada consignó que “lo más grave es que el niño le dijo a su mamá que no quiere ir con el padre porque abusa de él. Cuando dijo eso, la hermana del niño, que tiene 15 años, dijo que a ella también le pasó”.
Cuando la madre fue a hacer la denuncia a la UFI especializada en violencia de género de San Isidro, desde allí ordenaron que la DDI de San Isidro “se lleve a la menor de una forma aberrante, con gritos desgarradores, la policía golpeó a la madre porque se abrazó a su hijo adentro del patrullero y la arrancaron de ahí. Estamos hablando de una jueza de familia y una fiscal especialista en violencia de género. Nunca vi nada igual”, manifestó Martínez Valarino.
En tanto, destacó que la jueza alega “que el niño no ve a su padre porque su madre le llena la cabeza pero no se lo escucha: pedimos abogado del menor y no nos lo dieron, pedimos Cámara Gesell y dicen que no hay. Ellos decidieron que la madre tiene una actitud obstruccionista”.
“El sistema es perverso, como estos personajes que tienen a cargo un juzgado de familia, tengo 53 años, más de 30 de abogada y nunca vi algo así, es inhumano. Voy a pedir el juicio político a la jueza, a la fiscal, voy a denunciarlos por incumplimiento de los deberes de funcionario público y voy a seguir hasta las últimas consecuencias porque ya excede lo profesional, me siento responsable de esta mujer que está destruida”, admitió la abogada.