A 50 años del golpe de Estado contra el mandatario constitucional Salvador Allende, el presidente del tribunal que juzgó el Plan Cóndor en la Argentina, Adrián Grünberg, manifestó que el operativo “fue un acuerdo represivo regional pactado entre los gobiernos dictatoriales de varios países del Cono Sur”, que en primera instancia incluyó a Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay y Bolivia, y luego se sumaron Brasil, Perú y Ecuador. La organización terrorista “tuvo su nacimiento formal en una conferencia que se celebró en Santiago de Chile, entre el 25 de noviembre y el 1 de diciembre de 1975”.
En declaraciones a Napalm, por Radio Provincia AM1270, sostuvo que “la reunión había sido convocada por el dictador chileno Augusto Pinochet, quien el 11 de septiembre de 1973 había derrocado con un golpe de Estado al presidente socialista Salvador Allende, que había asumido democráticamente en 1970”.
El magistrado señaló que “Pinochet llamó a esta conferencia a través de su mano derecha, que era el jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional de Chile (DINA), Manuel Contreras, un militar y hombre de su máxima confianza”. Seguido, recordó que “invitó a las autoridades militares y policiales de los países mencionados, aunque Brasil no concurrió a la primera reunión”. Se trató de un encuentro para “organizar un esquema represivo de persecución y aniquilamiento de los opositores políticos de izquierda de las distintas dictaduras de Sudamérica”.
De todos modos, reconoció que “los acuerdos bilaterales –entre los represores- existían desde antes de esa reunión”. Incluso destacó que “en Argentina aún había un gobierno democrático” pero de todos modos participó de “estos acuerdos de inteligencia y de eliminación de opositores”. En tal aspecto, apuntó que “una muestra de esto fue el asesinato en la ciudad de Buenos Aires del general Carlos Prats (y de su esposa), que había sido muy leal a Salvador Allende”. El militar chileno y se esposa “se habían exiliado en la Argentina y se le colocó una bomba en septiembre de 1974, en un hecho en el que actuaron las fuerzas represivas que prestaron colaboración para estos asesinatos a manos del agente de la DINA, Enrique Lautaro Arancibia Clavel”.
Grünberg detalló que “posteriormente el Plan Cóndor iba a actuar en todos estos países intercambiando información de los opositores políticos y sociales, para detectarlos y entregar información entre los países y luego capturarlos”, situación que “incluía la intervención de agentes extranjeros en cada uno de los países”.
Por último, afirmó que en la Argentina, cuando se realizó el golpe del 24 de marzo de 1976 “ya había muchos exiliados chilenos y uruguayos, por lo que el país fue el centro operacional del Plan Cóndor”.
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