El gobernador Axel Kicillof abrió con un discurso la caravana “Del kilómetro cero del peronismo a la capital nacional del peronismo”, desde Berisso a La Matanza. El mandatario preguntó “dónde iba a empezar esta recorrida sino es donde empezó todo, donde empezó a ponerse de pie la dignidad del pueblo trabajador, donde empezó el Estado a reconocer los derechos de nuestro pueblo” y vaticinó que “este es el empujón final para llevar a Sergio Massa a la Presidencia y alcanzar la reelección de nuestro gobierno popular para transformar la Provincia”. A su vez, dijo que se trata del puntapié para asegurar la victoria de Fabián Cagliardi, en Berisso, y de Mario Secco, en Ensenada, al tiempo que “en La Plata vamos a poder tener al peronismo” con el triunfo de Julio Alak para “devolverle a los bonaerenses una capital que hace tiempo que no tiene y que exprese el orgullo y la fuerza de la Provincia”.
Kicillof señaló que los próximos comicios “son una elección histórica y decisiva”, y destacó que “el pueblo entero está empezando a comprender todo lo que se juega en 15 días”. Seguido, alertó que “no se juega un período de 4 años de gobierno” sino que “la derecha está planificando destruir conquistas históricas del pueblo trabajador y de los sectores medios, está planteando cambiar la matriz productiva de la Argentina”. Asimismo, enfatizó que “quieren terminar con la industria nacional, la universidad, la ciencia y la tecnología, quieren ir en contra de nuestra soberanía, se pasan por no sé dónde la lucha por las Malvinas y los DDHH”.
El Gobernador señaló que “por primera vez en mucho tiempo, los negacionistas ponen en riesgo la construcción histórica más importante de este período”. Por eso, subrayó que “esta marcha que empieza en el KM 0 del peronismo, empieza diciendo que ‘fueron 30.000’”.
Por otra parte, señaló que “iniciamos este recorrido que tiene paradas, pero hoy empieza esta caminata por las calles que no va a parar hasta el 22 de octubre. Toda la militancia en la calle caminando. Todos los que entienden que están en juego derechos tienen que militar”.
Más tarde, el mandatario sostuvo que “la educación para el pueblo no se vende, se defiende” y apuntó que “no le vamos a dar la salud pública a los mercaderes de los medicamentos, de los tratamientos de la salud y la enfermedad. La salud pública no se toca”.
Por último, admitió que “puede faltar distribución y salario, pero con los derechos de los trabajadores conquistados con tanta lucha, ni un paso atrás”, y cerró: “Nadie que tiene noción de Patria puede pensar que alguno de estos candidatos puede llegar a la presidencia para negociar la soberanía de las Malvinas ni los 40 años de la democracia y no estamos dispuestos a discutir la memoria, la verdad y la justicia”.