En una charla en El Holograma y La Anchoa, la periodista Mariana Iglesias, especializada en la vida de Julio Cortázar, expresó: “En la Escuela Mariano Acosta él tenía un profesor que se llamaba Arturo Marasso, a quien quería mucho y respetaba, y es quien lo acerca al mundo del jazz”. A lo que añadió: “En el colegio secundario se reúne con amigos de su edad y arman un grupo con intereses estéticos. Ahí se empiezan a reunir en un sótano en la calle Rivadavia al 3000 y comienzan a compartir más música”.
En ese sentido, aseguró: “Rayuela es para leer con jazz de fondo, sin duda. Hay una parte en donde se concentra mucho este género musical. Incluso se consigue un material que se llama Jazzuela, que está organizado de manera tal que vas leyendo los capítulos y vas escuchando los temas que se van mencionando. Está buenísimo hacer ese ejercicio, es un aprendizaje también”.
Por su parte, Mariano Loiácono señaló: “Yo creo que él conocía, había escuchado mucho jazz, pero lo aborda desde un lugar de oyente siempre. No creo que se haya considerado un especialista”. Mientras que Iglesias manifestó: “Una vez estaban él, García Márquez y Carlos Fuentes en un tren, yendo de París a Praga, y Fuentes le pregunta a Cortázar como se introduce el piano en el jazz. Ahí estuvo cuatro horas hablando; ósea que el tipo era un intuitivo, pero además conocía”.
A su vez, la fundadora de Coolturarte enfatizó: “Cortázar ha escrito tanto sobre Buenos Aires y la quiso tanto. Si tuviera que desglosar su circuito acá, empieza en el Teatro Colón que era un lugar que le gustaba mucho y en el que tuvo sensaciones muy potentes al observar el público. La euforia del público aplaudiendo a Arturo Toscanini en el año 1941 lo asustó y a partir de ahí le surge un cuento maravilloso que es Las ménades, donde nos muestra su gran potencial como escritor fantástico”.
Continuando con la conversión, el trompetista enfatizó en el género musical y detalló: “Es muy difícil encontrar en el interior una escena de jazz clara. La ciudad que le sigue a Buenos Aires es Rosario, pero la escena no es muy grande realmente si la comparas. Es difícil generar eso si no hay lugares donde tocar”. En tanto agregó: “No sé si Córdoba tiene algún club de jazz. Festival sí, pero eso funciona como una isla; un festival no hace una escena, solo la fortalece si es que existe”.
Por último, recalcó: “A veces se saca de contexto el origen de la música y eso es importante para entenderla. El jazz no es una música elitista en su origen, todo lo contrario, es popular. Es el movimiento popular que más se ha expandido musicalmente; el tango también, pero no tanto. Ha sido tan fuerte el movimiento social que genera, es que no es la música solamente, es todo lo que trae”.
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