En comunicación con “El Repaso”, por Radio Provincia, Salgado negó que haya un pedido de amnistía de Nicolás Maduro a Donald Trump para poder irse de Venezuela sin conflictos. Al respecto dijo que “es una versión que empezó a circular a través de la agencia Reuter y el Miami Herald, cuando se conoció que efectivamente los dos presidentes habían tenido una conversación, pero que fue hace más de 10 o 15 días. De esa charla no se sabe casi nada porque ninguno dijo nada de lo que habían hablado, pero esos vacíos los llenaron con versiones”.
Agregó que “del lado venezolano se ha desmentido totalmente la posibilidad de algún tipo de acuerdo en ese sentido. Eso parte de una cuestión que es que se entiende a nivel internacional que Maduro está débil y no es tan así, eso no se verifica en lo interno”.
“Fíjate que llevamos tres o cuatro meses -continuó- desde que comenzó la presión militar fuerte en el Caribe, para que se quiebre la fuerza armada venezolana, que haya algún tipo de deserción, o que los militares entreguen a Maduro. Pero no pasó nada de eso. Maduro no parece débil, ni tiene una actitud que demuestre algún tipo de debilidad y por otro lado, la tranquilidad de los venezolanos que miran de cerca las noticia, pero la vida sigue y la gente no parece dispuesta a abandonar sus espacios por una amenaza”.
Consultado sobre el impacto de la distinción a María Corina Machado con el Premio Nobel de la Paz, Salgado aseguró que “en Venezuela no hubo ninguna reacción interna, ni festejos, ni demostraciones. La oposición venezolana está muy dividida y María Corina Machado no representa a toda la oposición, no es la gran líder de la oposición, como se intenta vender afuera”.
En esa línea insistió que “su gran capital político era el hecho de qué estaba supuestamente clandestina en Venezuela. Ahora aparece del otro lado del mundo, y me parece que de esa manera pierde su principal capital político. Esto mismo ya le pasó a otros dirigentes que terminaron yéndose como Leopoldo López y Juan Guaidó”.
Por último, el analista internacional relativizó la situación que vivieron los periodistas de C5N a quienes les retuvieron varias horas los pasaportes y los deportaron. Al respecto remarcó que “desde hace un par de años que las personas que llegan como enviados especiales de algún medio deben tener un permiso del Ministerio de Comunicación, más aún si son de un país que no tiene relaciones diplomáticas. Eso ya ha pasado”.