En declaraciones a Hay Un Lugar por Radio Provincia AM170 afirmó “por un lado se habla de las tecnologías como algo que hay que incorporar” y al mismo tiempo “limitar”, por lo tanto, “pareciera ser en principio una especie de dicotomía o de contradicción”. Asimismo, añadió: “Se las mira desde distintos puntos de vista cuando uno la piensa como padre o maestro”.
En ese marco, el especialista expresó: “Esta dicotomía es importante para saber de qué estamos hablando: si de la preocupación familiar de que los chicos sean adictos a las pantallas o el uso pedagógico de las pantallas en las escuelas”.
Al respecto, explicó que desde las investigaciones que lleva adelante- hace 4 años- la Universidad Pedagógica Nacional en el cual “tratamos de enfocar desde lo pedagógico y educativo un trabajo con las tecnologías (…)” que plantea una tercera postura frente a esta polarización.
Esta última consiste en “ver de qué manera la escuela de la misma manera que con la ESI (Educación Sexual Integral) tematizó el patriarcado, los micromachismos y puso en palabras las cosas que nos preocupaban de las relaciones de género” y del mismo modo que “la educación ambiental puso en escena los que nos preocupaba de los crímenes ambientales y ambas fueron superadoras de sesgos” se puede llegar a “una educación digital en clave integral, crítica y emancipadora”.
Seguido, agregó que este enfoque “no habla de la incorporación de las tecnologías para innovar” sino “que se pregunta qué pasa con estas tecnologías que nos hacen hacer cosas que preferiríamos no hacer o que nos hacen dejar de hacer cosas que solíamos hacer”.
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