La ex defensora de Boca y de la Selección Nacional, Valeria Cotelo, trabaja actualmente como profesora en todas las categorías femeninas y en las infantiles del Club Deportivo Roca. En declaraciones a Radio Provincia, habló de sus inicios en el fútbol, de su paso por la Selección y los cambios que atraviesa el conjunto nacional, y de su proyecto deportivo en la institución rionegrina.
“Actualmente vivo en General Roca, en un pueblito muy chiquito que se llama J. J. Gómez, donde nací. Siempre supe que iba a volver”, comenzó. Allí, de chica, jugaba en la calle porque desde entonces hubo un fuerte desarrollo del fútbol femenino. Su acercamiento a la práctica más oficial se produjo cuando “una chica grande del barrio empezó a formar un equipo y fue a buscar a mi hermana. Sentí una gran desazón porque no me había convocado, pero yo también fui igual y me metí”. Eran los años noventa. Recordó que “al poco tiempo, mi mamá que era bastante emprendedora, agarró la posta del equipo y empezamos a entrenar bajo su mando. Me tenía bastante cortita, y como yo era bastante gambeteadora me decía que si no la largaba me sacaba del equipo”.
Cotelo nació en marzo de 1984 y en esa época no se veía fútbol femenino. “Por eso soñaba jugar en la selección con Ariel Ortega”, expresó, y señaló que pudo seguir maravillada el torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos Atlanta 96, que fue el primero en el que se disputó un certamen femenino.
Su sueño de jugar en la Selección llegó tiempo después, aunque compartió plantel con pares jugadoras, y con los varones que veía por televisión. “Participé de dos mundiales (2003 y 2007) y me quedó la pena en el corazón de haberme quedado afuera de la lista para los Juegos Olímpicos (2004) y de la Copa América que ganó la Selección (2006)”. Sin embargo, reconoce que en ese momento no estaba en un buen nivel. Cotelo indicó que “antes llegar a los mundiales era muy difícil porque participaban 16 selecciones y Sudamérica tenía solo dos cupos. Además de Brasil, Perú era muy fuerte y Colombia tenía un gran juego”.
Luego de retirarse como jugadora, se volvió al sur con la idea de trabajar en el fútbol femenino. “Me puse a trabajar con nenas chiquitas para poderle formarlas y que lleguen a primera con otras herramientas. Ahora me encuentro en el Club Deportivo Roca y este año por primera vez se hace la Liga Confluencia, que está asociada al Consejo Federal, y nosotras estamos participando”, sostuvo.
Si bien terminó jugando en el equipo de primera, su principal tarea lo desempeña como profesora de todas las categorías del femenino y de las categorías infantiles de los varones. En ese sentido, apuntó que “estamos impulsando el fútbol mixto en infantiles, por lo menos hasta los 12 años. De esa manera, les estamos dando una enseñanza de vida, enseñando que pueden ocupar los mismos lugares los varones y las mujeres, a compartir, a convivir, a que tienen los mismos derechos”. En tal aspecto, subrayó que “el fútbol femenino va a cambiar la cabeza a las generaciones futuras. Hay que hacerlas partes, a sentirse importante”.
La entrenadora también habló de la llegada de Germán Portanova, como nuevo director técnico de la Selección Mayor y Sub 20 de fútbol femenino. Si bien aclaró que no lo conoce personalmente, resaltó que “el movimiento de citar a jugadoras que hace mucho que no estaban y que son importantes está bueno porque va a motivar para todas las que están participando del torneo local”. Además, opinó que “siempre es importante el recambio y es importante mantener el equilibrio. Durante mucho tiempo se dejó de lado a las jugadoras grandes y es importante tener futbolistas con experiencia y roce internacional”.