La economista Cecilia Gonzalez Bonorino analizó la decisión del gobierno nacional de poner en marcha el programa Precios Máximos junto con retrotraer el valor de 1.432 productos al 1 de octubre.
En diálogo con "Hijos de 30 mil" por Radio Provincia, Bonorino aseveró: "Nosotros manifestamos nuestro apoyo a esta medida porque tiene que ver con que la recuperación económica no nos está alcanzando en igual medida a todos y todas. Algunos datos publicados marcan a través de un relevamiento de balances contables de las empresas alimenticias o empresas de insumo difundido como acero, aluminio, están incrementando sus márgenes muy encima de lo aceptable, por ejemplo, Techint aumentó su margen de ventas un 40 %, lo cual es irrisorio teniendo en cuenta la situación que estamos viviendo y eso aumenta los precios".
"Entendemos que el acuerdo de precios no va a resolver el problema de la inflación pero si viene a equilibrar un poco el poder de mercado que tienen los distintos actores, uno de los grupos alimenticios que se quejó era Molinos Rio de La Plata que en 2020 no perdió dinero, en 2021 agrandó su margen de ganancias al 2.6 %", apuntó la economista.
En ese sentido Bonorino dijo que "si no hay un Estado que esté equilibrando esas fuerzas de mercado probablemente lo que pasaría sería que los trabajadores pierdan poder adquisitivo".
"Se buscan presiones que sobredimensionan las medidas del gobierno. No es un rasgo anti empresarial que tiene el gobierno, de hecho las ha ayudado durante la pandemia con subsidios para pagar salarios, exenciones impositivas", replicó la economista en función de las críticas y amenazas de "desabastecimiento" del sector empresarial.
Por otro lado consultada en torno a las negociaciones para el pago de la deuda externa afirmó: "El modelo que representó Macri pensaba que la inflación era un problema monetario y lo que terminó sucediendo es que tomó deuda y quienes terminan pagando son los gobiernos nacionales y populares. El año próximo vencen 20 mil millones de dólares, nosotros no podemos pagar en los costos irrisorios que tomó el macrismo".
"Por qué no podemos no pagarle al FMI? porque no es sólo un banco.. es un actor político para dar el visto bueno a la Argentina para poder tomar crédito internacional", finalizó.