La especialista indicó que "por un lado tenemos lo que tiene que ver con la alimentación vegetariana o vegetariana estricta, con sus diferentes ramificaciones. Se trata de personas que pueden optar por no comer ningún tipo de carne, o no incluir ningún producto derivado, a comer alguno de todos ellos".
Las opciones van de la mano con "decisiones alimentarias personales, gustos, o de conocer aquello que nos cae bien o no". El veganismo, "como posicionamiento político filosófico, tiene que ver mínimamente con eliminar el consumo de animales" por ejemplo.
Así, "lo que tenemos que tener en claro es que el vegetarianismo estricto, es eliminar carnes o alimentos en los que haya implicado que, en la producción, haya muerto un animal".
En esa línea Guerrero resaltó que "muchos productos están producidos con un gelificante para darle consistencia a alimentos procesados, como las gelatinas de todo tipo, que además se sabe que no son tan beneficiosos como se ha planteado".
En términos de alimentación consciente "la realidad es que la gelatina tiene aportes de proteína, pero hay alimentos que atribuyen mayores proporciones y evitándolos, eliminamos el consumo de colorantes" porque en ello "hay mucha puja con los intereses de la industria alimentaria", recordó.
Para finalizar dijo que "lo mismo pasa con los quesos que antes eran cuajados en el estómago de los mismos animales, de hecho el estómago se utilizaba para tal fin, donde se permitía que las bacterias desarrollaran ese proceso".