El doctor en Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, Mariano Echenique analizó la situación del sistema educativo durante el menemismo y comparó sus políticas con la administración de Mauricio Macri.
En No Corras, por FM 97 UNE el autor de "La propuesta educativa neoliberal" recordó que el gobierno de Carlos Menem manifestó “una afrenta fuerte a movimientos populares y a la educación. El mote de privatista lo tenían bien ganado. Eran partidario de las privatizaciones en la educación. Permitió el establecimiento de universidades privadas y la transferencia de los colegios nacionales a las provincias sin asignar recursos”.
Echenique recordó que durante esa época “las matriculas se expandieron aceleradamente del 55 % al 77 % con lo cual el presupuesto educativo se tuvo que repartir en un universo de alumnos mucho más grande que en el comienzo de la época”.
Y señaló que al aumentar las matrículas los sistemas educativos provinciales “no podían sostener el servicio educativo, se empezó a pagar en bonos” y sucedió algo que “fue histórico”.
“Se instala la carpa blanca donde hubo grupos de docentes ayunando por más de 1000 días. Eso fue algo histórico” remarcó el investigador y destacó que a la ampliación de la matrícula, hay que sumarle “todo el proceso de destrucción del tejido social que comenzó en los 90”.
Echenique relató “Las escuelas empezaron a ocupar otro lugar. Intentaron revertir las consecuencias de un modelo que no sólo era educativo sino también social”.
Finalmente, Echenique encontró una política de continuidad entre el Menemismo y el Macrismo al destacar que ambos consideraron a la educación como “un sistema ineficiente que gasta los recursos del Estado”.
“A lo cual Macri le agrega que ‘se cae’ porque no hay oportunidad para pagar una universidad privada. Pero ambos estuvieron enfrentados a los sindicatos. Calificaron a las huelgas en el sector como enfrenamientos políticos y no por reclamos concretos. Y denunciaron la politización estudiantil. Incluso, en el gobierno de Macri se llegó a definir a los estudiantes para profesores como alumnos fracasados, politizados y que con ellos no se podía garantizar la educación”.