Guillermo Nicolás, diplomático de carrera en medio oriente y desde agosto a cargo de la embajada Argentina en Qatar aseguró que desde que llegó al puesto "el tema excluyente son las cosas vinculadas a la Copa del Mundo”.
En No Corras, por FM 97 Une, el funcionario relató que estuvo en la cancha en el debut de la selección Argentina y aseguró “a los embajadores nos invitaron a un lugar especial que estaba inundado de sauditas. Me tuve que bancar los gritos y los festejos . No lo podían creer. Eso es el fútbol”.
Y aseguró: “Me sorprendió la cantidad de argentinos en el estadio. Esperaba una mayoría importante de sauditas, porque es un país fronterizo y menos argentinos. Pero estuvo bastante pareja la concurrencia para ambos equipos”.
Nicolás recordó que el Estadio de Lusail tiene "capacidad para 80 mil personas y es el más grande de todos” y señaló que “hubo unos 35 mil argentinos tranquilamente”.
Por otra parte, el diplomático agregó que “ante la masiva llegada de argentinos” a Qatar una de las cosas que más preocupaba en la embajada era que el “importante cambio cultural” pudiera generar “algún tipo de conflicto con la población local o con las fuerzas de seguridad. Pero afortunadamente no se han dado”.
Nicolás, subrayó que pese a que se ha convocado a efectivos de otras policías del mundo y se ha aumentado la presencia de las fuerzas de seguridad en las calles, “la actuación policial va a seguir cierto lineamiento de flexibilidad y de laxitud de las leyes qataríes y no se va a aplicar salvo en casos de delitos manifiestos.”
Seguido, el entrevistado puntualizó que en la Embajada se trabajó en función de “4 puntos fundamentales. Primero el tema de la vestimenta, pese a que con el correr de los días y la presencia de los extranjeros se demostró que no hay complicación con ese tema, siempre que se mantenga un cierto respeto por algunas cuestiones más tradicionales acá como que no se puede circular con el torso desnudo o entrar con shorts a una mezquita".
Segundo, agregó “el consumo de alcohol en la vía pública” porque aquí “está prohibido, pero tampoco está siendo un motivo de incidente entre los turistas y la policía”, tercero destacó “la situación del colectivo LGBT, donde tampoco hay problemas” y por último “ el contacto físico porque acá hombres y mujeres no tienen contacto físico en la calle, cosa que para nosotros es normal. Hoy eso tampoco parece ser un problema. Además desde aquí la recomendación es evitar tener contacto con hombres y mujeres qataríes”.
“Yo creo que las fuerzas de seguridad se van a dedicar a prevenir y no a intervenir de manera represiva. Es decir que van a dejar su actuación para casos más grave o donde se constituya un delito” afirmó.
Nicolás, se refirió al contexto particular del país, la situación política y la garantía de los Derechos Humanos y aclaró: “Es difícil hablar de democracia, con base griega. Estos Estados fueron creados de otra manera, están vinculados a una cuestión religiosa. Son estados fundamentalmente basados en tribus. Son estados tribales, que en algún momento han llegado a un consenso. Eligieron a una tribu como líder de la cosa pública, eligen un parlamento y así funcionan. Y esto no genera rechazo porque la vida en Qatar es muy holgada. El qatarí vive muy bien. No tienen quejas. No hay motivos para que se puedan generar reivindicaciones democráticas”.
Finalmente, aclaró que “en el Golfo si no traen gente de otros países para hacer algunos trabajos manuales no hay gente para que lo haga. Sin embargo cuando llegan, la situación de esos trabajadores inmigrantes no es buena. Se remonta a una situación medieval. Y pese a que ha ido mejorando, no se pueden organizar, ni está permitido el derecho de huelga y las jornadas laborales son muy extensas”.
Y cerró que si bien se hablan de muchas muertes durante la construcción de los estadios y la obras para la Copa: “no importa cuántos fueron porque en el fondo lo que discutimos son los derechos laborales de la gente”.